El Maserati Ghibli es una de las berlinas deportivas de la firma italiana por excelencia. Este modelo trata de extrapolar las características de los deportivos británicos a una berlina sofisticada italiana.
El nombre de este modelo proviene de una serie de modelos fabricados por Maserati en los sesenta, por lo que se trata de un vehículo que busca rememorar una de las mejores épocas de los deportivos italianos.
El Ghibli cuenta con un diseño muy similar al de sus hermanos de gama, pero a la vez posee rasgos distintos. Sus formas tienen el estilo de los auténticos deportivos y de los modelos más lujosos, dos conceptos bien ligados a este modelo.
Su frontal es afilado y agresivo, aunque con un tono elegante. La parrilla cromada enmarca el temido tridente, y le acompañan unos faros LED estrechos que desafían con la mirada. Por último, como no, el capó y los pasos de rueda se encargan de darle la auténtica forma Maserati y dotan de personalidad al deportivo italiano.
Como signo propio de la marca, las aletas delanteras se adornan con una triple entrada de aire que indica que no estamos ante un coche cualquiera. En la zaga, más alta que el frontal, encontramos una ligera sensación de lujo. Cuenta con bonitos pilotos LED muy llamativos y un paragolpes con formas robustas y cuatro salidas de escape.
En su interior, el Ghibli está dotado de una calidad superior, tanto en los pequeños detalles, cuidados al milímetro como en los materiales del habitáculo.
Su parte mecánica tiene bastante que decir, y es que posee un motor diseñado nada más y nada menos que por los ingenieros de Ferrari. Se trata de un bloque de seis cilindros en V que desarrolla una potencia de 430 CV.